Londres.- Manchester United aprovechó que le enseñaron la cartulina roja a Robert Sánchez a los cinco minutos de iniciado el partido para derrotar al Chelsea donde el ecuatoriano Moisés Caicedo fue titular los 90 minutos por pizarra de dos goles a uno bajo un torrencial aguacero que cayó durante todo cotejo.
El primer partido en la historia de la Premier League en el que hubo dos o más goles, tarjetas rojas y sustituciones en la primera mitad se decidió con los goles del capitán del United, Bruno Fernandes, y de Casemiro, que fue el otro jugador expulsado antes del descanso.
Pero fue la expulsión de Sánchez la que marcó el rumbo del partido.
El internacional español corrió desde su portería para encontrarse con Bryan Mbeumo mientras el delantero superaba la defensa del Chelsea.
Sánchez entonces derribó al delantero fuera de su área en lugar de permitirle pasar y rematar el balón hacia el arco vacío.
La respuesta de Enzo Maresca a la tarjeta roja fue sacar a Pedro Neto y a Estevao Willian y, como Cole Palmer tuvo que ser sustituido tras sufrir una recurrencia de una lesión en la ingle, el Chelsea perdió a tres jugadores de ataque en el espacio de 20 minutos.
Trevor Chalobah acortó distancias para el Chelsea con un cabezazo a 10 minutos del final, pero el United mantuvo los nervios a raya y llegó al pitido final con la ventaja intacta.
La victoria fue la segunda del United en la temporada y se produjo frente al propietario minoritario Sir Jim Ratcliffe, quien le dio garantías al entrenador Ruben Amorim sobre su futuro 48 horas antes.
Esto también significa que el Chelsea todavía no ha ganado en Old Trafford desde 2013, cuando Sir Alex Ferguson era el entrenador del United.