Berlín La selección Española de Fútbol es la primera clasificada a las semifinales de la Eurocopa con un gol en el último minuto del tiempo suplementario que le permitió superar por 2-1 a la anfitriona Alemania, con la que había igualado 1-1 al cabo de los 90 minutos reglamentarios.

Mikel Merino, jugador de la Real Sociedad que saltó al ruedo a los 79′, convirtió de cabeza el gol del triunfo a los 119′ en un vibrante duelo arbitrado por el inglés Anthony Taylor, de regular actuación, en el MHPArena de Stuttgart, colmado por unos 60 mil aficionados.

En tiempo reglamentario, la «Roja» de La Fuente se puso en ventaja a los 50′ con un gol de Dani Olmo, que había ingresado a los 8′ por la lesión temprana del juvenil Pedri y juega en Lepzig, equipo de la Bundesliga que consagró campeón a Bayer Leverkusen, donde milita Florian Wirtz, otro que saltó desde el banco de suplentes a los 46′ y mantuvo con vida a la «Mannschaft» de Julian Nagelsmann al empatar a los 89′.

Alemania pareció crecer tras el empate y contó con opciones para llevarse el triunfo, pero España, que terminó con diez por la expulsión de Dani Carvajal en la agonía del duelo, resistió, se sostuvo con la solvencia de su arquero Unai Simón y metió la estocada letal en el momento justo.

Quinta victoria de cinco posiles para el equipo de De la Fuente, que superó la prueba en territorio «enemigo» y confirmó su chapa de candidata a la corona que dejó vacante Italia, una de sus «víctimas» en la fase de grupos que abdicó al trono en octavos de final con derrota inapelable por 2-0 frente a Suiza, que había sido escolta de los anfitriones (con los que empató en la última fecha) en la primera ronda.

España, que se había puesto en ventaja merecidamente hoy con aquel gol de Olmo en un momento del partido que dominaba, devolvió «gentilezas» y a aquel empate agónico de Wirtz le pagó a Alemania con la misma moneda, cuando ya prácticamente no quedaba tiempo para más, a pesar de que Taylor adicionó algunos minutos al cumplirse el suplementario dándole una última chance a los dueños de casa.

El mismo árbitro al que los futbolistas alemanes le recriminaron por una mano en el área de Marc Cucurella no sancionada en la prórroga antes de que el gol de Merino, asistido por Olmo, sepultase definitivamente las últimas esperanzas de llevar la definición a los penales de un partido en el que ambos equipos se alternaron el dominio y las emociones.

España terminó ganando el duelo, así como Lamine Yamal le ganó el suyo al también juvenil Jamal Musiala antes de dejar la cancha apenas superada la hora de juego, mientras que en la pulseada de veteranos en el mediocampo, Rodri estuvo más parejo con un Toni Kroos que en su último partido como profesional jugó los 120 minutos, aportó su talento habitual y también cometió algunas faltas duras como la que sacó de la cancha a Pedri como si se tratara de un Real Madrid-Barcelona.

Antonio Rudiger comandó la zaga local, pero resultó amonestado demasiado temprano (a los 12′) y llegó demasiado tarde al cierre en el gol de Merino que selló la suerte de España y la desgracia de Alemania, uno de los candidatos que se despide hoy del torneo y de la posibilidad de celebrar su primera corona como anfitrión de una Eurocopa, como le había sucedido en 1988 (el campeón fue Países Bajos), un año antes de la reunificación.

Pudo haberse inclinado en su favor hoy la balanza, sobre todo porque jugó mejor en el suplementario que una España que acusó síntomas de cansancio y se sostuvo gracias a la solvencia de Simón y a que los delanteros alemanes fallaron en la puntada final, rubro en el que acertó en cambio Merino al conectar el centro de Olmo que silenció al estadio, amén del festejo de la minoría de fanáticos ibéricos presentes.

Lo único para lamentar que tiene España es que no podrá contar con el expulsado Carvajal cuando dirima el boleto a la final del torneo continental (que se jugará el 14 de julio en Berlín) el martes en Munich frente al ganador del partido que animaban a continuación en Hamburgo Francia y Portugal, «verdugos» de Bélgica por 1-0 y de Eslovenia por penales (3-0), en octavos de final, respectivamente.

En el partido entre los dos seleccionados más laureados en el torneo continental con tres coronas cada uno (Alemania se consagró en 1972, 1980 y 1996 y España lo hizo en 1964, 2008 y 2012), se impuso la «Roja», que de yapa retiró a Toni Kroos, flamante campeón de la Champions que hoy «colgó los botines» antes de lo que él esperaba hacerlo.

Alemania había derrotado por 2-0 a Dinamarca en octavos tras avanzar como líder del Grupo A con dos triunfos y un empate, mientras que España eliminó a la debutante Georgia por 4-1 en la fase previa luego de adjudicarse el Grupo B con tres victorias, siendo la única del torneo que ganó sus tres partidos en esa ronda inicial.

Mañana, la Suiza de Murat Yakin buscará su pasaje a semifinales en Düsseldorf frente a la Inglaterra de Gareth Southgate, que superó por 2-1 a Eslovaquia en octavos de final luego de adjudicarse el Grupo C.

El ganador chocará en semifinales, el miércoles en Dortmund con el vencedor del duelo que animarán mañana en Berlín Países Bajos, que goleó por 3-0 en octavos a Rumania y fue tercera en el Grupo D detrás de Austria y de Francia, y Turquía, escolta de Portugal (con los mismos puntos) en el Grupo F, que superó en octavos a Austria por 2-1 con doblete de Merih Demiral, quien no estará presente porque fue castigado con dos fechas de suspensión por su festejo con connotaciones políticas en ese partido.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *